domingo, 24 de abril de 2016

Mi lado derecho del cerebro voltea frascos




El mágico misterio de la habilidad para dibujar parece consistir, al menos en parte, en la capacidad de cambiar el estado del cerebro a un modo diferente de ver, percibir. 
Betty Edwards/"Aprender a dibujar con el lado derecho del cerebro, 1979".


 


En el curso de dibujo artístico y acuarela al que me acabo de suscribir se promueve la metodología de aprendizaje de la conocida Betty Edwards. Allá por los setenta, aquella doctora en Bellas Artes sugiere la práctica de algunos ejercicios la mar de curiosos y con los que desarrollar el potencial creativo de cada cuál, este localizado en el lado derecho del cerebro, la parte con menos actividad según apostilla.
Luego de tomar la primera clase, se me ha encargado adquirir una serie de pigmentos y útiles con los que entrar en materia las posteriores; véanse carboncillos, acuarelas, papeles texturados, difuminos y sanguinas entre otros.
Desconozco si en lo sucesivo me apañaré con la acuarela y el pincel, si cumplirá una con los avances que se le presumen al alumnado, si lograré bocetos dignos de algún piropo o lo contrario. Hasta la fecha puedo dar cuenta de que bien mirado, un frasco de acuarela llama con insistencia a la fotografía, que no es poco.
Mi lado derecho del cerebro voltea frascos, los voltea y los echa a volar podría decirse. Si este ominoso desvarío tendría la aprobación de mi lado izquierdo es algo que se me escapa. No voy a preguntarle.











8 comentarios:

  1. Intensidad en tus ojos
    maravilla cuando sacas las fotos

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  2. Cuanto menos, Curioso y divertido... Yo soy mala de solemnidad con cualquier tipo de dibujo. Ánimo! Besos

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  3. Si se tienen ganas todo se aprende, amiga. Por el momento ganas es lo único que tengo;)
    Un abrazo.

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  4. Me encanta tu blog, espero me visites y comentes también, saludos de Perú

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